En muchos ámbitos existe la creencia de que la inteligencia y la fuerza física son inversamente proporcionales, por lo que si un personaje muestra una musculatura admirable, lo más probable es que sea un tonto irremediablemente perdido. Si ponemos la fuerza y la inteligencia como las dos puntas de un espectro, este sería el que apunta más a la fuerza mientras que El Sabihondo sería el que apunta por el lado de la inteligencia a costa de sacrificar algunas aptitudes físicas.
En algunos casos, puede que este ni hable y solo emita chirridos que dejan atónito a todo lo que tengan a su alrededor; si pueden comunicarse siquiera con lenguaje verbal, lo más probable es que hablen con el Lenguaje Cavernícola y hablen de sí mismos en tercera persona, así como repetir su propio nombre incontables veces en oraciones.
El fortachón descerebrado puede ocupar cualquier rol dentro de la historia, por lo que no se lo puede asociar específicamente con villanos o con héroes. Es más, en algunos casos puede que no tengan ni idea de lo que están haciendo y simplemente estén obedeciendo a alguien al que aprecian o siguen demasiado.
Una variante es el Gigante Gentil, el cual tendrá las mismas propiedades... intelectuales que el fortachón descerebrado pero tendrá también un espíritu mucho más sensible.
Este patrón se ve mucho en los juegos de rol estratégicos, donde muchas veces los ataques se dividen entre físicos y mágicos. Ya que varios juegos ponen la inteligencia como parámetro para medir la habilidad que se tiene con los ataques mágicos, si un personaje sobresale en fuerza física, probablemente sea muy malo con las magias. En estos casos, los magos ocuparían el lugar de Hábil pero Débil.
Compáralo con el Letalmente Estupido, el cual suele destruir grandes edificaciones y objetos valiosos y pone en peligro la vida de los demás no por su malicia sino por su estupidez.
Ejemplos:
Videojuegos- Banjo Kazooie tiene a Conga, un gigante en el primer nivel del primer juego que gusta de arrojarle naranjas al jugador desde la punta de una palmera mientras habla con el Lenguaje Cavernícola.
- Crash Bandicoot tiene dos clásicos villanos: Tiny Tiger y Koala Kong.
- Tiny Tiger, a pesar de tener unos brazos y un torso que meten miedo, tiene piernas muy delgadas. Irónicamente, todas las batallas contra él en la trilogía lo ponen saltando en plataformas.
- En el primer juego, Koala Kong deja una ventana de debilidad en la que Crash puede atacarlo durante su batalla. ¿La razón?: a Kong le encanta presumir sus músculos cuando tiene la ocasión.
