Labios que palidecen a la roja, roja rosa,
Caminará con alegría dondequiera que vaya."
Cuando pensamos en una princesa, la asociación más común es la princesa arquetípica, la perfectamente buena, inocente y bella princesa, que es prácticamente una santa con un título real. Estas están en gran medida asociadas con cuentos de hadas, y están consideradas tan antiguas como ese tipo de historias.
De hecho, este personaje empezó en la era victoriana. En esa época en la que las historias estaban modeladas por Disney, el concepto de un cortejo amoroso se dio la vuelta para quitarle todo el contexto sexual, y convertir a la dama noble en un ideal de los tiempos. Todo para dar la imagen más positiva y menos compleja a los niños, e incluso a los adultos también.
La Clásica Princesa tiene varios rasgos generales.
Los tres primeros puntos se requieren:
- Es mujer.
- Es de la auténtica realeza, por nacimiento o matrimonio, con pocas excepciones.
- Es la inocencia personificada. Todo virtud y nada de vicio. Muy a menudo, es virgen (si se menciona). Es buena y amable, no importa lo que pase.
Los siguientes puntos son opcionales, y ya que Los Tropos Son Herramientas, estos pueden distorsionarse o mezclarse:
- Siempre es guapa, sea o no la mujer mas bella del mundo. En animación, su belleza puede atraer chispas, flores o pájaros y pequeñas criaturas del bosque a su alrededor.
- Su ropa siempre es elegante, sea simple u opulenta, y blanca, rosa, azul o morado. Si acaba en harapos, todavía hace que los harapos le queden bien.
- Si se trata de un musical, su voz cuando canta sera preciosa y probablemente sera una soprano.
- Es tímida y reservada, y tan delicada que no moverá un dedo para defenderse.
- Vive feliz para siempre con su príncipe, de quien siempre se enamora, incluso si es un matrimonio arreglado.
- Si la historia es para niños, no muere al final.
Ejemplos:
- Super Mario Bros. Nos presenta a la Princesa Peach, o Toadstool... o como quieran llamarle. Ella es la personificación de la amabilidad y la empatía, recompensando a Mario con un beso en la punta de la nariz. Aunque protagonizó su propio videojuego, sigue viendose elegante y cariñosa hasta con sus enemigos.
- Subvertido con la Princesa Daisy, de Super Mario Land. Si bien es un clon de Peach cuando fue concebida, sus características terminaron cambiando gracias a los fans, haciendola más impulsiva e imprudente. Sin embargo sigue siendo igual de elegante que la original.
- Subvertido con Fiona, de Shrek. Es elegante, guapa, carismática y jovial, pero no le impide practicar artes marciales, eructar o ser grosera si la situación lo amerita.
- The Legend of Zelda siempre ha tenido... pues, a Zelda, la princesa de Hyrule. Es elegante, tierna, justa y siempre hermosa. Sin embargo en posteriores encarnaciones asume con orgullo su título y asume un rol de gobernante, aunque siempre es la Damisela en Apuros. En Ocarina of Time tomó un papel más activo cuando se disfrazó de Sheik, aconsejando a Link durante la aventura.
