Algunas veces no puedes permitir que te vean. Todos deben creer que moriste. O vieron tus superpoderes, o ahora saben que existen cosas como vampiros y hombres lobo, o simplemente testificarán en tu contra e irás a la cárcel. Quizá quieren evitar que un ciclo de venganza siga ocurriendo de la manera más directa.
Así que debes matar a todos en la habitación o en las inmediaciones. O incluso, en la ciudad.
Este tropo se identifica cuando todos en una situación pueden resultar en una amenaza. En este caso, la gente puede estar más que contenta de dejarte solo, pero eso ya no es una opción.
Por cierto, si eres un sirviente del villano de la historia y se te ha ordenado matar a todos los testigos, ten en cuenta una cosa: hasta donde tu jefe sabe, tú también lo eres.
Un caso específico — generalmente hecho por personajes heroicos que necesitan eliminar individuos que pongan en peligro la misión que están realizando — sería matarlos para proteger su identidad (claro, esto es raro). Es diferente de no dejar supervivientes, porque en estos casos, los estás matando para derramar más sangre; otras veces, por entretenimiento; y otras, incluso odio.
Si dejas vivo a un mensajero para relatar lo que sucedió, es lo opuesto.
Ejemplos:
- En múltiples historias sobre la piratería en el Caribe, se dice que el Capitán del barco ordena a un grupo de hombres selectos a transportar su parte del botín capturado a una isla o bosque en particular, para que se encargue de enterrarlo. Después de esto, el Capitán asesina a dichos hombres para que nunca revelen donde escondieron el botín. Si añadimos fantasía a la mezcla, usualmente los piratas muertos se convierten en vigilantes del tesoro hasta el retorno del Capitán, o de quien sea digno de reclamar el tesoro.
